Uno de los alimentos que más sufre alteraciones en nuestro país es el pescado. Según un estudio realizado por el Ministerio de Sanidad, el 31,7% de las muestras de pescado analizadas en 2016 presentaban una composición distinta a la declarada en el etiquetado. En concreto, se detectaron 42 casos de fraude en los que se sustituyó una especie por otra de menor valor o se engañó al consumidor sobre el lugar de origen del producto.
El atún rojo es el pescado que más fraude ha sufrido en los últimos años. En el caso concreto de este producto, se trata de una alteración muy perjudicial para la salud, ya que se sustituye por una especie de atún de alto riesgo toxicológico, el Katsuwonus pelamis. Este pescado contiene altas concentraciones de mercurio, una sustancia tóxica que puede causar graves problemas neurológicos, especialmente en los niños.
Otro de los alimentos que se suele alterar es el jamón. Aunque en este caso la alteración no es tan perjudicial para la salud, sí es un engaño al consumidor, ya que se sustituye el jamón ibérico por jamón serrano, que es un producto de calidad inferior. También se ha detectado que algunos embutidos contienen carne de cerdo en lugar de la carne de jabalí o de ciervo que se indica en el etiquetado.
No se puede saber con certeza qué alimento está alterado.
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Alimentos alterados y adulterados: ¿Qué son y por qué debemos evitarlos?
Los alimentos alterados o adulterados son aquellos que han sido modificados de su forma natural, ya sea añadiendo o quitando ingredientes. Muchos de estos alimentos son procesados, lo que significa que han sido sometidos a un tratamiento químico o físico para mejorar su apariencia, sabor o textura. Algunos ejemplos de alimentos alterados o adulterados son:
-El aceite de oliva que contiene aceites vegetales de baja calidad
-La leche que contiene químicos para aumentar su grasa
-Los embutidos que contienen carne de cerdo o de res
-Los quesos que contienen saborizantes artificiales
-Los yogures que contienen azúcar o edulcorantes
Los alimentos alterados o adulterados son generalmente más baratos que los alimentos naturales, pero también son menos saludables. Estos alimentos pueden causar problemas de salud, como obesidad, enfermedades del corazón, cáncer y diabetes. Por esta razón, es importante evitar los alimentos alterados o adulterados.
¿Cómo se alteran los alimentos? – Aprende sobre los efectos de la exposición a los agentes externos en la calidad y seguridad de los alimentos.
¿Cómo se alteran los alimentos?
Los alimentos pueden alterarse cuando están expuestos a agentes externos como la luz, el aire, el agua, el calor o la temperatura. Todos estos factores pueden afectar la calidad y seguridad de los alimentos.
La luz puede dañar el sabor, el color y la textura de los alimentos. El aire puede oxidar los alimentos y hacer que se deterioren. El agua puede diluir los nutrientes de los alimentos y hacer que sean menos saludables. El calor puede cocer los alimentos y hacer que se pierdan sus nutrientes. La temperatura puede congelar o descongelar los alimentos, lo que también puede alterar su sabor, textura y nutrientes.
Los alimentos pueden estar alterados de muchas maneras. Pueden estar podridos, en mal estado o simplemente estar vencidos. También pueden haber sido manipulados de alguna manera, como con aditivos químicos o radiación. Si bien algunos de estos cambios pueden ser inofensivos, otros pueden ser muy peligrosos para la salud.
Los alimentos pueden estar alterados de muchas maneras. Pueden estar podridos, en mal estado o simplemente estar vencidos. También pueden haber sido manipulados de alguna manera, como con aditivos químicos o radiación. Si bien algunos de estos cambios pueden ser inofensivos, otros pueden ser muy peligrosos para la salud.
Los alimentos que son alterados son aquellos que han sido modificados de alguna manera, ya sea química o físicamente. Esto puede incluir el procesamiento, la cocción, la adición de ingredientes o la eliminación de nutrientes.